NANCY/BESANÇON, FRANCIA: ALGUNAS INFORMACIONES SOBRE LA SITUACIÓN DE BORIS

El 10 de abril de 2020, durante el primer encierro, el compañero anarquista Boris prendió fuego a dos antenas de telefonía móvil de los cuatro operadores de telecomunicaciones de la región del Jura, que también albergan las comunicaciones de la policía y la gendarmería.

Como él mismo ha explicado desde la prisión donde lleva diez meses encarcelado: «Ha llegado el momento de la aceleración de los flujos y de los datos, de la conectividad de los objetos cotidianos para controlar, escuchar, rastrear y espiar cada vez más, para hacer del ser humano un esclavo cada vez más grande de la máquina. Esto es lo que la dominación llama «progreso» y «civilización». En realidad, este proyecto de sociedad es distópico. Frente a este entramado digital, no hay 36.000 soluciones. Me parece necesario superar la etapa de la crítica y actuar aquí y ahora, vinculando las ideas a las acciones (…). Formo parte de los que, al primer resonar del orden estatal y sanitario, se negaron a encerrarse en casa y salieron a atacar directamente uno de los pilares de la dominación» (Por qué quemé las dos antenas de Mont Poupet, junio de 2021).

Encarcelado desde septiembre de 2020 en la prisión de Nancy-Maxéville, tras meses de investigación y sobre la base del ADN encontrado en el lugar, Boris fue juzgado el pasado 19 de mayo en esa ciudad. Juzgado casi a puerta cerrada, sin su abogado que había pedido un aplazamiento y sin lxs compañerxs solidarixs a lxs que se les prohibió la entrada en el juzgado con el pretexto de las normas covid-19, la basura con toga le condenó a 4 años de prisión, 2 de ellos en prisión, más cien mil euros de indemnización. Inmediatamente recurrió a esta sentencia, cuya fecha se acaba de anunciar.

Boris será juzgado de nuevo ante el Tribunal de Apelación de Nancy el 20 de septiembre de 2021 a las 14:00 horas, y todo el mundo puede seguir expresando su solidaridad con él, de la forma más cálida que considere oportuna…

Además, nada más volver a la cárcel tras esta condena, Boris acudió al pretorium (tribunal interno de la prisión), donde se le impusieron tres semanas de aislamiento, dos de ellas suspendidas, por un altercado ocurrido cuatro meses antes con otro recluso, que ya se había solucionado entre las partes implicadas sin necesidad de la sucia mediación de las autoridades penitenciarias. A pesar de esta semana de aislamiento y de la lentitud del correo, su moral sigue siendo buena. En este sentido, también podemos señalar que el correo saliente del compañero sigue pasando por el despacho del juez, a pesar de que la investigación está cerrada desde principios de abril, un juego de manos burocrático sobre el que cada uno puede sacar sus propias conclusiones.

Por último, en la propia Besançon, la policía no parece dejar de lado el caso (sigue abierta una investigación por el incendio de una antena de SFR en esta ciudad en el mismo periodo), y al menos dos personas han sido abordadas por policías de civil en los últimos meses para intentar recabar información sobre los familiares de Boris*. Pronto más actualizaciones de estos hechos…

La solidaridad es el ataque
¡Libertad para todos!

Para conseguir su número de prisión y escribir a Boris, puedes enviar un correo electrónico a besakattak at riseup.net, mientras sus órdenes de detención en la cárcel siguen aseguradas por Kaliméro, un fondo de solidaridad para lxs presxs de la guerra social.

Anarquistas en solidaridad con Boris,
6 de julio de 2021.

[ENGLISH]


FUENTE: INDYMEDIA NANTES
TRADUCCIÓN: ANARQUÍA