«Necháyev partió al exilio y utilizó a Zasúlich como intermediaria en su correspondencia con otros revolucionarios, lo cual era usual en “El Boy”, como lo llamaba Bakunin; fue arrestada en Moscú […] Para Zasúlich, su periodo en prisión le llevó a convencerse de la necesidad de acabar con la opresión y a identificar su vida en la cárcel con la situación general de Rusia, que consideraba una enorme prisión. Pasó varios años de prisión en prisión sin ser acusada de nada formalmente, sólo fue acusada formalmente cuando las autoridades rusas advirtieron de que Vera distribuía propaganda prohibida a algunos estudiantes, como también de extender la conciencia revolucionaria entre el campesinado. […] Poco después en 1878 atentó contra el general Trépov, gobernador de San Petersburgo, al que acusó de haber maltratado a un preso político, fue arrestada y juzgada por el disparo contra el militar. Se había presentado ante el gobernador fingiendo necesitar un certificado de buena conducta y logró herirle en la pelvis con el segundo disparo. Su atentado no sólo conllevó cambios en la forma de juzgar los casos de subversión y una humillación para el Gobierno, sino que supuso el comienzo de la campaña de terrorismo contra la administración autocrática zarista, fundándose en 1879, la organización terrorista más temibles de los últimos tiempos en Rusia, Naródnaya Volya (Voluntad Popular)».
Enviado: Ex-Nihilo