De 2008 a 2014, el Estado belga ha llevado a cabo, una vasta investigación concentrada en las luchas multi-formes – pero siempre sin concesiones – que se atacaban a los centros de encierro, a las fronteras, a las cárceles y a este mundo basado en la autoridad y en la explotación. En su punto de mira, se encontraba: la biblioteca anarquista Acrata, publicaciones anarquistas y anti- autoritarias (Hors Service, La Cavale et Tout doit partir), decenas de panfletos y carteles, una buena centena de acciones, ataques y sabotajes … en fin, la lucha contra el poder en sus distintas expresiones.