Anoche quisimos enviar un mensaje de solidaridad a Boris, un compañero anarquista que está en coma por un incendio en su celda de la cárcel de Nancy-Maxèville.
En Montreuil la gentrificación avanza a pasos agigantados con nuevos edificios para una población más acomodada atraída por la extensión del metro. No somos admiradores de las barriadas pobres y de los barrios atestados de tráfico, una simple forma de capitalismo, aunque sea ilegal. Pero el laberinto de callejones entre las pequeñas casas autoconstruidas tiene su encanto y permite otras relaciones entre las personas que viven allí, menos dictadas por el dinero. También una relación diferente con el Estado. Las sinuosas callejuelas hacen menos eficaz la videovigilancia, que también avanza en Montreuil (como en todas partes en Paname).
En este contexto, la publicidad es un importante vector de transmisión de los valores capitalistas y autoritarios de esta sociedad. Estos valores incluyen la propiedad, el consumo, el trabajo, el «éxito» y la conformidad. Estas ideas han colonizado el imaginario de la mayor parte del mundo, incluidas las clases sociales más pobres y marginales. Este conformismo de pensamiento impide a la gente imaginar otra cosa, otra vida. ¿Cómo hablar de revolución a personas que sólo sueñan con la riqueza, la familia y los fútiles artilugios que llenan sus vidas?
Así que pensamos que una furgoneta de JC Decaux sería un buen objetivo. La que estaba aparcada en la calle Ernest Savart saltó por los aires. Lo mismo para una furgoneta Enedis (no hace falta presentarla, en el país más nuclearizado del mundo) un poco más abajo, en la calle Victor Beausse.
¡Ánimo Boris!
¡Cabeza en alto, corazón brillante!
¡Viva la anarquía!
FUENTE: ACT FOR FREEDOM NOW!
TRADUCCIÓN: ANARQUÍA