En la madrugada del pasado lunes 27 de Marzo un coche de Securitas Direct murió entre las llamas en la zona de Ciudad Universitaria, en Madrid. Cinco litros de gasolina fueron mas que suficientes para acabar con su vida. Después de esto, solo esperamos que nuestro calor le llegue a las compañeras secuestradas en las cárceles del Estado Alemán para llenarlas de fuerza, y que muchos otros coches de las fuerzas represivas, publicas o privadas, sigan este mismo camino.
Despreciamos esta realidad y a todas aquellas estructuras y personas que la protegen, y queremos que esto solo sea un pequeño calentamiento y un aviso, uno entre tantos otros que han sucedido y sucederán, para la cumbre del G20 que se celebrara en Hamburgo este verano.
Muerte al estado y viva la anarquia.
Celula incendiaria por el colapso