“Las palabras son cómodas, la acción no lo es”
Desde que nacemos nos imponen el respeto, pero: ¿Qué es el respeto? ¿Obedecer a los paradigmas autoritarios que nos impone la sociedad? ¿La obediencia es acaso respeto?
El respeto impuesto ha llevado a la sociedad a ser atolondrada a tal nivel que nos ha convertido en inútiles individuos dependientes de alguna autoridad que nos restringe, que nos limita a obedecer sin ningún tipo de análisis personal, por eso vemos a miles de personas arrodilladas frente a individuos que por llevar una sotana, un uniforme, etc. creemos son superiores a nosotrxs, por su sotana lo hace sagrado ya que esta a servicio de “nuestro” señor, por utilizar uniforme es venerable por su grado de autoridad y por eso reprimen, abusan y asesinan. El respeto a la autoridad es nuestro enemigo, de por vida seremos irrespetuosxs ya que NO vamos a respetar cada raíz de la dominación implantada, tenemos la opción que siempre han querido extinguir, la opción de la desobediencia. No esperen que tengamos respeto con las iglesias, ni con lxs policías, ni menos con el estado. Nunca respetaremos la dominación.
Cuando pensamos en no atacar, pensamos en la represión y también en lo que esto arrastra consigo, serias persecuciones, privación de “libertad”; el desafío de un-a anarquista siempre fue y siempre será enfrentar el despiadado sistema y también hacer lo imposible para no caer en la trampa; el colosal militarismo está a pasos gigantes y frente a nosotrxs, no nos quedaremos atrás, pero no elegiremos seguir sus mecanismos , la lucha anarquista se expande y cada día cada noche iremos por mucho más. La crítica estará siempre estará desde el aporte y no desde la comodidad.
A través de los siglos, la inquisición mantiene vigencia, sutilmente se ha ido “humanizando”, en el sentido de mostrarse más “piadosa” y respetuosa de los “derechos” de las personas, encerrando a quienes rompen ese respeto y autoridad que tienen el poder para dominar las mentes de lxs creyentes, en ese sentido, quienes deciden atacar a sus símbolos y estructuras siguen siendo perseguidxs, castigadxs, en ese sentido, no existe diferencia entre épocas de suplicio y la actual. Lxs compañerxs Mónica Caballero y Francisco Solar han sido sentenciadxs a 12 años de presidio en las mazmorras españolas, la solidaridad debe ser permanente. Hemos pegado unos afiches en el Centro Cultural de España, porque esta cultura del confort avala al sistema opresor y es un símbolo más de la enajenación social.
La moral anarquista sigue cuando el conflicto sigue y duele cuando golpeamos al enemigo, valoramos a nuestrxs compañerxs, amamos sus actitudes y su coraje. Y no estamos acá para avalar ni para juzgar sus “errores”, el sistema ya lo hace.
La libertad es lo que cada ser viviente aspira, el instinto de sobrevivencia nos lleva a escapar de cualquier intento de sometimiento, es por ello, el intento de fuga de lxs compañerxs de la CCF en Grecia es el proceder según los términos de libertad de lxs que no se dejan someter y siguen luchando desde las cárceles. El látigo del Poder se extiende a familiares y cercanxs de quienes luchan y deciden no dejar solxs a sus seres queridos, en ese sentido, el Poder desconoce del afecto, la solidaridad y la complicidad. Nuestra alma impía siempre estará libre, nuestras blasfemias serán el escupitajo a cualquier símbolo de dominación, la autoridad no representa ningún símbolo de respeto para nosotrxs.
La complicidad es arma, es fuego, a nuestros hermanos y nuestras hermanas les mandamos firmeza y fortaleza, desde el corazón abrazos y besos, que haya salida por todo lado, que el viento sople fuerte y que se convierta la situación.
A lxs bastardxs traidores, lacayxs del sistema su hora llegará. Y nuestro dia llegará…
Saludos a lxs guerrerxs, ni culpables ni inocentes desde estas tierras alejadas dominadas por el Estado boliviano .
Un saludo a lxs compañerxs Mónica Caballero y Francisco Solar.
Saludos a lxs compañerxs de la CCF y Anggeliki Spyropoulo, un abrazo a sus familiares y amigxs perseguidxs, Athena, Evi estamos con ustedes.
Vándalos nómadas salvajes
Fuente: Contramadriz