Otro estudiante fue asesinado durante la alternancia entre la escuela y el trabajo. Lorenzo, de 18 años, murió en una fábrica cerca de Udine en el que debería haber sido su último día de prácticas. Los programas de alternancia escuela-trabajo están demostrando ser otra forma de esclavitud moderna en la que se obliga a la gente a trabajar gratis para los beneficios de los industriales.
Unos días más tarde, en Roma, la policía cargó contra una manifestación espontánea de estudiantes que expresaban su enfado con lo ocurrido con Lorenzo y pedían el fin del plan de escuelas de trabajo, lanzando porras y rompiendo caras. Más sangre en la conciencia de los políticos, que en realidad están interesados en mucho más que eso en estos días.
No vamos a ponernos aquí a decir que la escuela «es otra cosa», que hay que ir a la escuela para estudiar y obtener una cultura. La escuela es exactamente eso: es un lugar donde se forman los nuevos trabajadores dispuestos a ser explotados o los nuevos vástagos que se convertirán en nuestros amos. La escuela es una fábrica de obediencia y disciplina.
Si acaso, lo que nos sorprende y entristece es la ausencia de insubordinación juvenil, de sana ira contra la autoridad, en el aula como en la fábrica, en la cocina como contra el maestro.
Contra una vida amordazada
¡que surja el contagio de la revuelta!
CLUB ANARQUISTA SPOLETO
viale della repubblica 1/A – asamblea los lunes a las 18 horas
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FUENTE: INFERNO URBANO
TRADUCCIÓN: ANARQUÍA
