Unos dos meses después de la vista del 12 de julio, el tribunal se pronunció sobre la propuesta de aplicar una vigilancia especial a 7 compañeros de Bolonia: 6 rechazos y 1 aceptación. Nuestro compañero Guido será puesto bajo vigilancia durante dos años con la obligación de permanecer.
Unos días antes de la vista, el fiscal Dambruoso había presentado una integración para que el tribunal se pronunciara no sólo sobre la «peligrosidad cualificada» por los delitos de terrorismo, sino también sobre la peligrosidad general. Y, de hecho, es en base a esto último que se aceptó la solicitud. Según las motivaciones, son las acusaciones realizadas por el propio Dambruoso con la Operación Ritrovo las que tienen «marcada relevancia», «prueba de la propensión a actos de acentuado peligro para la seguridad y la tranquilidad pública». Incluso entran en el fondo de esa investigación de la que, según lxs jueces, «se desprende claramente» que nuestro compañero «fue el autor del incendio del repetidor, en la localidad de Monte Donato, en diciembre de 2018». Hasta la fecha, el infatigable fiscal ya ha recurrido dos de los seis rechazos y no se descarta que se añadan otros.
Toda nuestra solidaridad va a lxs compañerxs sometidxs a esta infame medida y a todxs lxs afectadxs por el Estado por atentar contra este mundo.
FUENTE: INFERNO URBANO
TRADUCCIÓN: ANARQUÍA