El Estado francés está a la cabeza de la guerra capitalista depredadora contra el planeta. Protege su explotación monopolística de los recursos naturales y sus inversiones en el Norte de África y Oriente Medio con intervenciones militares y todo tipo de apoyo a las fuerzas contrarrevolucionarias. El militarismo francés es un pilar fundamental de la OTAN y el ala militar de la UE. En territorio francés golpea al movimiento social con medios militares…
La hipocresía de la democracia burguesa queda al desnudo por el estatus que reserva a los militantes capturados. El militante libanés Georges Ibrahim Abdallah se encuentra en las cárceles francesas desde 1984, después de una serie de atentados contra los Estados americano e israelí. Según la legislación francesa, debería haber salido de la cárcel en 1999. Pero la detención de Abdallah se prolonga ilegalmente porque sigue siendo un revolucionario irreductible.
(Organización de Autodefensa Revolucionaria 2016 por intervención política armada con una granada en el puesto de guardia de la embajada francesa)
El rebelde anarquista Claudio Lavazza, tras 25 años de cautiverio por parte del Estado español por expropiaciones bancarias, sigue retenido por el Estado francés, cuando legalmente debería haber sido liberado en diciembre. El compañero Claudio Lavazza participó en el movimiento revolucionario de masas de los años 70 y 80 a través del PAC y otros grupos, fue un pionero de la resistencia en la cárcel, nunca dejó la lucha guerrillera.
El contraataque contra el terror de la patronal sigue siendo necesario a lo largo del tiempo.
Libertad para Georges Ibrahim Abdallah y Claudio Lavazza
Dimitris Chatzivassileiadis
FUENTE: ATHENS INDYMEDIA
TRADUCCIÓN: ANARQUÍA