La noche del miércoles 2 de marzo, atacamos el Instituto Francés en Atenas con molotovs.
Con este acto enviamos un mensaje de solidaridad de clase a lxs militantes perseguidxs que luchan contra el terrorismo del Estado francés. El Instituto Francés expresa la hipocresía de la democracia francesa, que esconde el vicio de la dominación capitalista tras el eslógan revolucionario incumplido de Libertad-Igualdad-Fraternidad.
En Calais, al lado de la frontera marítima de Bretaña y Francia, lxs inmigrantes que llegan allí con la esperanza de entrar en Bretaña o desalojadxs por la evacuación de otros campos de refugiadxs, han establecido un barrio de chabolas auto-organizado. La historia de la Jungla, como se denomina a la favela de lxs perseguidxs, comienza en 2002. Habiendo sido expulsados a patadas por la pobreza o por las guerras en sus países, la persecución de lxs inmigrantes continúa dentro de las fronteras europeas. Perseguidxs por patrullas fronterizas, maderos y fascistas, y muchxs habiendo pasado ya a través de prisiones y campos de concentración, lxs nuevxs residentes de Calais vuelven a tomar en sus manos una parte de sus vidas. A pesar de los muchos intentos del Estado en los años que han pasado de destruirla, esta gran comunidad de inmigrantes resiste y auto-organiza la vida con persistencia en algunas de las condiciones más adversas de absoluta pobreza y opresión continua. En la Jungla hay restaurantes auto-organizados, escuelas, patios de juego, artes como un teatro, una mezquita y una iglesia, todo operado por lxs propixs residentes junto con lxs solidarixs.
La Jungla por un lado refleja el vicio del régimen que atrapa a lxs oprimidxs en guetos urbanos y campos de concentración, condenándoles a vivir indefinidamente en la frontera. La imposición del control completo es la respuesta de lxs dominantes contra aquellxs que contraatacan e intentan auto-organizarse. Lo que no se alinea en base al “desarrollo” capitalista es bautizado como una ofenda y es oprimido. La Gendarmerie y la policía a menudo hacen redadas atacando con armas químicas y torturando, destruyendo viviendas y estructuras comunes, desplazando y encarcelando inmigrantes. Por otro lado, la Jungla señala la lucha de lxs oprimidxs por sobrevivir contra los planes de la dominación del Estado. Su existencia y su vigorosa resistencia a las operaciones de evacuación son un ejemplo característico de la lucha contra la persecución y el encarcelamiento.
El mes pasado el Estado francés anunció un plan de evacuar la parte Sur de la Jungla donde viven sobre 3000 inmigrantes, con el pretexto de un peligro higiénico para el área. El Estado, para romper la resistencia de lxs residentes migrantes, intentó inicialmente disfrazar la evacuación con motivos humanitarios, diciendo que las personas serían transferidas a contenedores de mercancías con calefacción, mientras que aquellxs que no cupiesen serían trasladadxs a campos de concentración y a otros puntos en Francia, no con violencia sino con “persuasión”. Al final el nuevo intento de evacuar comenzó esta semana y tiene el conocido rostro de la violencia y el terrorismo de Estado. Aquellxs que serán encarceladxs en campos de concentración serán separadxs de las personas con las que han construido una comunidad, serán filiadxs (fotos, huellas etc.) y descenderán a un régimen totalitario de control, dependencia y explotación por el Estado. La evacuación de la Jungla es claramente un ataque a la autodeterminación de lxs inmigrantes. Es por tanto un intento de atacar un proyecto de auto-organización de lxs oprimidxs. La estrategia del Estado francés es una parte de la “gestión de la crisis de los refugiados” común europea, la cual ya venga con una resonancia de extrema derecha o con un pretexto humanitario, apunta al control de lxs oprimidxs y a la creación de nuevas reservas de fuerza de trabajo humana explotada y miserable para el Capital.
La resistencia a los intentos de nivelación de la Jungla es una lucha contra las peores condiciones de la esclavitud de clase. En los enfrentamientos en Calais la tradición colonial de Francia, así como sus intervenciones imperialistas, al igual que hoy en día en África del norte, el fascismo inherente de la democracia urbana y su humanismo hipócrita son revelados, recordamos otra vez a Remi Fraisse que fue asesinado en octubre de 2014, luchando por el bosque de Sivens, por la misma escoria uniformada que ahora ataca a la Jungla.
RESISTENCIA Y AUTO-ORGANIZACIÓN DE LXS OPRIMIDXS POR TODO EL GLOBO.
MADEROS FUERA DE LAS COMUNIDADES DE LXS PERSEGUIDXS.
DERRIBEMOS LOS CAMPOS DE CONCENTRACIÓN Y LAS PRISIONES.
VICTORIA PARA LA LUCHA DE LA JUNGLA.
SABOTAJE AL ESTADO FRANCÉS Y A LA FRONTERA EUROPEA.
Desde los barrios de Atenas
Consejo de Acción Anarquista “Gracchus Babeuf”
Fuente: Voz Como Arma