FRANCIA: UNA CARTA DE IVAN, DESDE LA PRISIÓN DE VILLEPINTE

Te escribo para compartir algunas reflexiones y para enviarte algunas noticias.

Me gustaría empezar con algo que ilustra muy bien los métodos del sistema judicial. Unos días después de mi detención, la jueza que dirigía la investigación, Stéphanie Lahaye, envió a dos policías de la SDAT [la Subdirección Antiterrorista de la policía judicial] (entre los que se encontraba el policía judicial «RIO 1237232» -como las máquinas, se llaman por números-) a interrogar a mi hija y a su madre. Obedeciendo sus órdenes, siguiendo los procedimientos de la justicia estatal intentaron presionar a una niña de 12 años. Querían interrogarla a solas. Su madre obviamente se negó a abandonarla.

Un procedimiento ordinario, banal, un acto necesario para establecer la verdad según los jueces y policías. En mi opinión, un intento de sembrar el miedo. Una advertencia a mis seres queridos y a todo el mundo de que, en la lógica inquisitorial de la Ley, las personas que son o que se ponen al lado de un anarquista acusado de acciones directas son sospechosas y deben ser incomodadas. Esto es similar a la lógica que se utilizó contra mí. Cuando la misma OPJ, durante las audiencias del GAV [interrogatorio en el momento de la detención], me preguntó – me acusó – de dar mi apoyo a los anarquistas encarcelados en Francia y en otros países. De haberles escrito y de haberles enviado de vez en cuando un poco de dinero. Por supuesto, he escrito a menudo a muchos compañeros encarcelados y he hecho todo lo posible para expresarles mi solidaridad.

Porque son anarquistas y también porque estoy convencido de la justicia y la necesidad de las acciones que se les imputan a algunos de ellos. Creo que la solidaridad, por los medios que sean, con los compañeros golpeados por la represión es fundamental. Evitar la solidaridad abierta con ellos por miedo a que la represión se extienda sería hacerle el juego a la Justicia, aceptar su lógica. Una lógica que nos haría retroceder cada vez más, hasta el punto de abandonar, o casi, a los revolucionarios encarcelados.

Vayamos ahora a los hechos por los que estoy actualmente en prisión preventiva. Aquí está la lista de los ataques incendiarios:

  • 22 de enero de 2022, un vehículo de Enedis (en París) y otro de SFR (en Montreuil);
  • 20 de febrero, un vehículo de Est Républicain (en Montreuil);
  • 4 de marzo, un coche con placa del cuerpo diplomático y un Aston Martin (en París);
  • 24 de abril, un vehículo de Enedis (en París);
  • 11 de junio, un coche con placa del cuerpo diplomático (en París).

Como dije en mi primera carta, también soy «testigo asistido» en otra investigación, iniciada por la PJ de París. Esta abarca 53 incendios de vehículos entre 2017 y 2021, reivindicados por anarquistas. No sé más sobre esta parte del caso.

En esta lista hay coches de instituciones estatales extranjeras (o de sus altos cargos), en barrios acomodados de París. Incendios que deben dar una imagen mitigada de Francia al personal diplomático de sus socios internacionales. Por mi parte (y sé que no soy el único), pienso que todos los Estados son directamente responsables de las guerras, la explotación y la represión que sufren miles de millones de personas. Podría ver estos incendios como una pequeña reacción. Mientras se espera algo mejor.

También hay algunos vehículos de gente rica y grandes empresas, en el sector de la energía por ejemplo (como Enedis, filial de EDF). Empresas que, con el pretexto de la «independencia energética», están creando los peligros nucleares de hoy, los posibles desastres nucleares de mañana. Hay empresas que adormecen nuestros cerebros con su propaganda de valores capitalistas y de Estado (como el diario l’Est Républicain) o que nos encierran en la tela de araña digital (como SFR).

Cada una de estas acciones ha sido explicada en una reivindicación y no tengo nada que añadir. En lo que a mí respecta, sólo puedo apoyar de todo corazón la práctica de la acción directa destructiva. Apoyo la elección de los objetivos de estos ataques, sus motivaciones y el hecho de reivindicarlos abiertamente como contribuciones a la lucha anarquista contra el Estado y el sistema capitalista. Lo mismo para la práctica de la solidaridad internacionalista con los anarquistas encarcelados, que estas acciones han expresado a menudo.

En cuanto a las noticias:

El 5 de octubre me presento ante el Juge des Libertés et de la Détention [Juez de las Libertades y de la Detención], que decidirá si prolonga mi prisión preventiva o me deja salir.

La nueva jueza de instrucción encargada de mi caso (la anterior cambió de destino) es Anne Grandjean, todavía en el tribunal de Bobigny.

Mi correo (entrante y saliente) sigue bloqueado, desde el 19 de julio. Al parecer, debería desbloquearse pronto (bueno, hay que tener en cuenta la rapidez de la burocracia judicial). En cualquier caso, en cuanto pueda recibirlo, intentaré contestar a cada una de las personas que me han escrito, a las que doy las gracias de antemano.

El expediente del caso ha sido depositado en el registro de la prisión, por lo que debería poder (aún teniendo en cuenta la lentitud de la burocracia penitenciaria) averiguar un poco más sobre lo que dicen los policías.

Mi más sincero agradecimiento a mis seres queridos, a los compañeros de Anarchist Bure Cross, a la Cassa Antirepressione delle Alpi Occidentali (también por su amable disponibilidad para el apoyo financiero). ¡Y a todos los que me han escrito!

Un guiño a los que expresan su solidaridad a través de acciones, como la hermosa pancarta en Bure y la de Caen, las pancartas a la llegada del Tour de Francia, la quema de una furgoneta Vinci en Hay-les-Roses, de un vehículo de la empresa de telecomunicaciones Cosmote en Atenas, de una antena de repetición en Barcelona o el saqueo de las antenas de repetición en el Gers. Gracias.

Un abrazo fraternal a los compañeros anarquistas encerrados en las cárceles de todo el mundo, especialmente a Alfredo, que lucha contra el 41-bis.

¡Viva la anarquía!

Ivan
Villepinte, 25 de septiembre de 2022

Para escribirme:

Ivan Alocco
n. d’écrou 46355
M.A. de Villepinte
40, avenue Vauban
93420 – Villepinte
Francia

FUENTE: INDYMEDIA LILLE
TRADUCCIÓN: ANARQUÍA