En solidaridad con Boris, que lleva un mes en coma tras un incendio en su celda, el domingo por la noche se prendió fuego a un vehículo de Orange frente a las oficinas de Orange en el centro de Grenoble.
¿Por qué Orange? Simplemente porque leímos el informe del juicio de Boris, y vimos que Orange, a través de su abogado, trató de poner a nuestro compañero en la peor situación posible. Por supuesto, los jueces, los fiscales y los guardias son igual de responsables de su situación, pero hemos querido iniciar una campaña contra Orange, porque es fácilmente accesible en todas partes: neumáticos rajados, escaparates rotos, chapas, coches quemados, antenas quemadas, etc., hay algo para todxs lxs que quieran participar en esta pequeña campaña, para demostrar que no olvidamos a Boris y que pensamos en él, ¡con la cabeza alta y el corazón ardiendo!
Aprovechamos este pequeño comunicado para participar en el debate sobre la solidaridad anarquista. Para nosotrxs esta solidaridad no debe limitarse a la represión, porque la sociedad tiene muchas formas de destruirnos, y en todas estas situaciones nos parece importante que lxs anarquistas se apoyen mutuamente, para demostrar que la afinidad no es sólo una palabra vacía. Especialmente desde el comienzo de la crisis del Covid, que ha aislado considerablemente a muchxs anarquistas. También queríamos decir que la solidaridad no es sólo atacar, que hay muchas formas de expresar la solidaridad con lxs anarquistas que nos rodean.
También aprovechamos la oportunidad para expresar en voz alta el espinoso problema de los objetivos de los ataques, que en los últimos años se han convertido en un punto en común con lxs fascistas/conspirativxs. Desde las antenas (recordemos que en casi todos los juicios por quemas de antenas en Francia, Boris fue la única persona que no expresó ideas conspirativas), hasta los centros de vacunación. ¿Qué dice esto del anarquismo actual? ¿Y cómo podemos asegurarnos de no confundir los actos anarquistas con los conspirativos, y por qué es esto importante? El hecho de que lxs izquierdistas lleven semanas golpeando la acera mano a mano con lxs fascistas/conspirativxs debería alertarnos del peligro de la idea de la lucha común, que significa que no nos importa con quién luchamos mientras tengamos las mismas prácticas y el mismo objetivo. Olvidamos que esas personas cuyas acciones aplaudimos o con las que nos manifestamos tienen posiciones opuestas a las nuestras en casi todo, y que seríamos su blanco en otros contextos.
¡Mucha fuerza y coraje para Boris y su familia!
Lxs refractarixs solidarixs
FUENTE: INDYMEDIA LILLE
TRADUCCIÓN: ANARQUÍA