Desde hace unos días, la compañera anarquista encarcelada en Soto del Real desde el 13-A está siendo objeto de diversos abusos por parte de la dirección del centro. Alegando “motivos de seguridad” no sólo se le ha denegado la posibilidad de mantener una comunicación vis a vis con su pareja el día de su boda, sino que también se le ha prohibido toda comunicación telefónica con ella y con otra persona más. Además, el subdirector del centro le ha impuesto varias sanciones disciplinarias para -según él- “incitar al motín” a las otras presas, y otra más como castigo por hablar con otras tomadas durante la noche.
Entendemos que todos estos castigos son represalias por la actitud combativa y solidaria de la compañera, que a pesar de la distancia y el aislamiento ha continuado determinada a participar en las luchas de la calle, enviando un mensaje de apoyo al Banco Expropiado de Gracia, y una carta donde se reafirmaba en sus convicciones y prácticas políticas de lucha contra el Estado y el sistema capitalista.
Desde el punto de vista de lxs que estamos en la calle, todos estos intentos por acallarla y aislarla sólo pueden revertir en una multiplicación de las muestras de solidaridad y los esfuerzos para difundir y hacer correr estas palabras suyas por las que la quieren castigar aún más. Recordemos también que en breve se acaba el plazo fijado para su estancia en Soto del Real y que se espera que su extradición al Estado alemán sea el día 30 de junio.
No permitamos que acallen la voz de las luchadoras presas!
Rompamos el cerco con el que quieren aislar a nuestras compañeras!
Corre la voz – Sal a la calle – Participa de las convocatorias – Actúa!
Fuente: Contramadriz