Páginas de lucha cotidiana fue publicado originalmente por la editorial bonaerense Argonauta en 1921. Desde aquel entonces, estas páginas no habían vuelto a circular. Se comprenderá que, por esto, era casi imposible acceder a los contenidos de esta obra. Gracias al trabajo entre Editorial Eleuterio y rebeldeἄlegre, este título vuelve a estar a disposición de todas y todos los interesados. Su primer formato será electrónico para su distribución sin restricciones en las redes virtuales. Es la segunda obra que se edita bajo este formato por Editorial Eleuterio. Dentro de los próximos meses, se dispondrá del libro físico para ampliar sus posibilidades de circulación.
Al decir del prólogo original, constituye este libro una selección de los artículos escritos por Enrique Malatesta en el diario anarquista de Milán “Umanitá Nova” entre el 26 de Febrero de 1920, en que apareció el primer número de la publicación, y el 18 de Octubre del mismo año, en que Malatesta fue arrojado a una cárcel por orden del gobierno italiano.
Escritos al correr de la pluma, entre las otras mil actividades del incansable agitador, quizás mientras recorría campiñas y ciudades haciendo propaganda subversiva, o mientras discutía entre el proletariado sobre las enseñanzas del nuevo verbo, que es verbo de solidaridad, o mientras asistía a reuniones o convenios para resolver alianzas revolucionarias, o mientras organizaba el diario colocado bajo su dirección, revelan sin embargo estos artículos, serenidad admirable de espíritu y cristalina claridad de conceptos. Es que tal ha sido siempre la vida misma de Malatesta, pese a las sinnúmeras contingencias de la lucha. Así se explica quizás que su diaria labor de propaganda esté simplemente hecha a base de amistoso diálogo; jamás en sus campañas agitadoras, en sus artículos o en sus discusiones se encontrará ni la pose del apóstol ni la acritud del polemista, sino tan solo… la conversación del amigo, la dialéctica ágil hecha con pasta de razonamientos imperturbables y de cálidas convicciones.
Las y los invitamos a la lectura de estás Páginas de lucha cotidiana, nuevamente abiertas al mundo y a la discusión, esperando no hacer de ellas un dogma y aspirando al despertar de ese prófugo deseo de libertad que deambula en nuestro espíritu.