Las calles de las principales ciudades de territorio dominado por el Estado chileno, en un día como hoy, 8 de marzo, hace dos años atrás se repletaban con miles de personas que con colores, gritos, consignas, fuego y barricadas visibilizan y/o atacaban a la lacra machista. Hoy a penas las calles las llenan algunos cuerpos. Muchxs prefieren esperar los cambios tan prometidos por el nuevo gobierno, desde la comodidad de sus casas, cambios que prometen acabar con el machismo heteropatriarcal entre lxs habitantes de este territorio.
La expectación por las nuevas políticas publicas y las reformas en los “temas de genero” a levantado una esperanza en una parte de grupos e invidualidades feministas, disidentes sexuales y en prácticamente en todos los sectores chupa banderas socialdemócratas.
Las esperas y esperanzas lamentablemente quedaron solo en eso, porque el heteropatriarcado no se terminará con ninguna reforma legal o con ayudas sociales.
Lamentablemente el heteropatriarcado es parte del sistema económico, social y cultural que nos domina. ¡Esta en todas partes! Lo encontramos en la forma en el como nos vemos a nosotrxs mismxs y a lxs otrxs. En la manera de relacionarnos, en el cómo nos someten, etc. No hay ser que no sea afectado por el patriarcado, pero sin lugar a duda a los ataques machistas no son iguales para hombres que para mujeres o transexuales, queers, maricas, lesbiana, sin victimizar estos 5 últimos son los mas afectadxs.
Hoy el poder se viste a la moda, toma atuendos feministas y de disidencias sexuales, ¿y porque no lo haría? Si todes tienen cabida en la fiesta democrática, todes pueden ser representades en las instituciones, todes podemos tener los mismos derechos constitucionales.
Lxs poderosxs pueden tomar estos u otros ropajes con tal de perpetuarse en el poder, como de la misma manera pueden levantar diversas iniciativas para mejorar las condiciones de vida de mujeres y disidencias sexuales, pero el ejercicio del poder por tanto la dominación estatal no terminará.
Los cambios en a forma en el como los poderosxs “humanizan” el sometimiento o crean un aparato represor mas blando o proclaman letes más inclusivas para distintos colectivos, no debería ser parte de las luchas de quienes quieren realmente la destrucción radical en todas las formas de opresión. Para que algo cambie radicalmente todes, todas y todos tenemos que actuar sin delegadxs, ni intermediarixs, ni esperas.
Hoy salen a la calle quienes no se quedan a esperas a que otrxs les rompan las cadenas, quienes aquí y ahora quieren destruir el patriarcado.
¡Acción directa en contra del macho!
¡Que todas las instituciones arden hasta sus cimientos!
MÓNICA CABALLERO
PRESA ANARQUISTA